Fuente: UPI, 20/07/2008.
La joven fue quien lanzó un jarro de agua a la ministra de Educación, Mónica Jiménez, la semana pasada.
Los dirigentes de esta agrupación consideran que María Música Sepúlveda no merece una sanción ya que, a su juicio, no ha cometido un delito sino "un acto impulsivo", por lo tanto no debería haberse judicializado.
La joven será pasada al Ministerio Público, luego de que los Tribunales de
Los miembros de
Para ejemplificar lo anterior mostraron una foto del docente Juan Soto con el ojo amoratado y contuso producto de un chorro de agua lanzado por un carro policial en la última marcha de profesores y estudiantes por
"Ninguna autoridad, ningún ministro, se ha acercado a ver qué le ocurrió al profesor Juan Soto, que está en riesgo de perder la retina de un ojo producto un chorro de agua. Se ha hecho escándalo de un chorro de agua limpia de un jarro que una adolescente vació sobre una ministra de Estado (…) por lo tanto no se puede comparar esto con lo que han sufrido Juan Soto, o el fotógrafo, el colega de ustedes, que está a la espera de una segunda intervención quirúrgica para poder recuperarle la visión. Esto corresponde a una campaña mediática para desviar la atención de la discusión central que es
Por su parte, el psicopedagogo Carlos Carreño afirmó que "si esta niña (María Música Sepúlveda) está con depresión o siente que su futuro no sirve para nada no creo que sea la única niña que está sintiendo eso y no creo que sea sólo en los barrios bajos (…) no creo que los especialistas puedan decir, ni tampoco los medios de comunicación, que el no tener dinero es lo único que en estos momentos está deprimiendo a la gente".
"Creo que las herramientas que la educación chilena ha dado a los chilenos para expresarse ni mostrar lo que tienen en su interior son tan pobres y tan escasas que podemos manifestar con las peores herramientas. Si no mejoramos la educación vamos a tener una mala república, llena de personas con enfermedades como ya las tenemos, enfermedades mentales, y llena de farmacias, llena de importaciones y con una ignorancia suprema, creo que eso es lo que angustia a esta niña y a muchos estudiantes de Arica a Punta Arenas, desde las clases más altas hasta las más bajas", expresó Carreño
Carreño añadió que no quitándole gravedad a la conducta de la niña María Sepúlveda, "lo que hizo no fue un delito sino un acto impulsivo y no un comportamiento permanente", y pidió que el gobierno no reaccione "con otro acto impulsivo, sin el análisis decantado, tranquilo, como personas maduras y preparadas que somos".
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